Índice
1. Introducción
Te damos la bienvenida al primer artículo práctico sobre la clasificación como técnica de estudio, en el que aprenderemos a clasificar estudiando los diversos tipos de estrofas. Esperamos que antes de llegar aquí le hayas echado al menos un vistazo a la teoría y al artículo que encabeza este monográfico. Si es así, enhorabuena, porque comprenderás mejor y más rápido el sentido de los pasos que vamos dando y evitarás tener que clicar en algunos enlaces. Dicho esto, ¡al turrón!
Nota. Si tienes que aprenderte urgentemente los tipos de estrofas y en este momento no puedes entretenerte en aprender la manera de hacerlo, te recomendamos que leas el artículo sobre la estrofa en nuestro Diccionario literario.
En esta práctica vamos a usar un documento sobre las estrofas literarias clasificadas, como es usual, atendiendo al número de versos. Para su elaboración nos hemos basado en las definiciones de nuestro Diccionario literario, donde, además, podrás encontrar comentarios y fragmentos a modo de ejemplo. Ábrelo en formato presentación (abrir con Chrome) o descárgalo en pdf.

2. Fase de planificación
Los elementos a ordenar, evidentemente, son los tipos de estrofas, cuyas características esenciales vienen definidas en las diapositivas 4 y 5. Así, en lenguaje coloquial, podemos decir que una estrofa es un grupo de versos agrupado en torno a una serie de características definitorias:
- Constituir por sí misma un enunciado completo.
- Número, tipo y distribución de las rimas.
- Cantidad, medida y distribución de los versos.
Y, como nos dice en la diapositiva 6, <<las diferencias en estos tres rasgos producen los diversos tipos de estrofas>>.
El objetivo de estudio que nos planteamos es memorizar los diferentes tipos de estrofas, sus principales características y cualquier otra información que nos sea valiosa a la hora de realizar un comentario de textos.
IMPORTANTE: antes de seguir, te animamos a que leas atentamente las diapositivas e intentes localizar en cada tipo de estrofas esas características definitorias de las que hemos hablado antes.
Una buena idea sería organizar las información de las diapositivas confeccionando una tabla. Pincha aquí (abrir con Chrome) o en la imagen de más abajo para ver la que nosotros hemos hecho.

Tras completar la tabla, el siguiente paso es decidir si vamos a considerar toda la información que hemos reunido en ella. Nosotros vamos a “desechar” la siguiente:
- Las variedades encadenadas del terceto y la tercerilla: porque pensamos que es una forma de usar la estrofa y no tipos estrofas.
- El pareado: porque es un tipo de estrofa conformada por un conjunto de variedades muy heterogéneas, lo que dificulta incluirlo en clases definidas por una única variable.
- Lo expuesto en la columna “Notas”: su inclusión supondría una la clasificación demasiado compleja, lo que no nos ayudaría a memorizar.
- Las variedades de cada estrofa, que no serán serán consideradas tipos de estrofas.
Todo no hayamos incluido y sea importante lo adjuntaremos a nuestra clasificación como información complementaria.
2.1. Tipos de estrofas a clasificar
De esta forma, los tipos de estrofas que vamos a clasificar son los siguientes: copla, copla de pie quebrado, cuaderna vía, cuarteta, cuarteto, décima, lira, octava de arte mayor, octava de arte menor, octava real, quinteto, quintilla, redondilla, seguidilla, serventesio, sexteto, sextilla, soleá, tercerilla y terceto.
3. Fase de ejecución
En nuestro caso, en el documento que usamos ya están reflejadas las características que utilizaremos en la clasificación.
NOTA: las diapositivas nos muestran las definiciones de cada tipo de estrofa. En una definición se exponen las características que usamos para diferenciar una cosa de las demás.
Además, gracias a la tabla que confeccionamos, también tenemos agrupadas esas características por tipología (ver definición de variable en Elementos de la clasificación). Por tanto, tampoco tendremos que averiguar las variables diferenciadoras. Recordemos cuales son: cantidad de versos (Cv), tipo de versificación (Tv), medida de los versos (Mv), cantidad de rimas (Cr), tipo de rima (Tr) y orden de las rimas. Además de estas, mientras confeccionábamos la tabla hemos observado que podríamos definir otra más: verso suelto (Vs) o sin rima.
El siguiente paso es decidir si usamos todas estas variables y el lugar que ocuparán en la organización jerárquica. Podemos empezar eligiendo cual será la que nos divida todos los tipos de estrofas en las primeras clases. Para que la clasificación sea lo más clara y útil posible, lo mejor es usar al principio las variables que produzcan menos clases, es decir, debemos ir de lo general a lo particular. Si nos fijamos, tipo de versificación, tipo de rima y verso suelto producen 2 clases cada una: regular o irregular, rima asonante o consonante y ningún verso suelto o al menos un verso suelto, respectivamente. Veamos en la siguiente lista cuantos elementos podríamos incluir en cada clase:
- Versificación irregular: 3 ⇒ seguidilla, lira y copla de pie quebrado.
- Versificación regular: 17 ⇒ cuarteta, redondilla, quintilla, sextilla, octava de arte menor, décima, cuarteto, serventesio, quinteto, sexteto, octava real, octava de arte mayor, cuaderna vía, tercerilla, soleá, copla y terceto.
- Rima asonante: 3 ⇒ soleá, copla y seguidilla.
- Rima consonante: 17 ⇒ cuarteta, redondilla, quintilla, sextilla, octava de arte menor, décima, cuarteto, serventesio, quinteto, sexteto, octava real, octava de arte mayor, cuaderna vía, lira, copla de pie quebrado, tercerilla y terceto.
- Al menos un verso suelto: 5 ⇒ terceto, tercerilla, soleá, copla y seguidilla.
- Sin verso suelto: 15 ⇒ cuarteta, redondilla, quintilla, sextilla, octava de arte menor, décima, cuarteto, serventesio, quinteto, sexteto, octava real, octava de arte mayor, cuaderna vía, lira y copla de pie quebrado.
A continuación ofrecemos los pasos que se han dado para construir la clasificación y, según el caso, explicamos porqué hemos aplicado primero unas variables luego otras.
3.1. Paso 1
Variable Vs (verso suelto) en la superclase «estrofas»
Se nos forman dos clases:
- C-1.1, en la que hay 15 tipos de estrofas que no tienen ningún verso suelto: cuarteta, redondilla, quintilla, sextilla, octava de arte menor, décima, cuarteto, serventesio, quinteto, sexteto, octava real, octava de arte mayor, cuaderna vía, lira y copla de pie quebrado.
- C-1.2, con 5 representantes que tienen al menos un verso suelto: terceto, tercerilla, soleá, copla y seguidilla.
Si observamos detenidamente la lista anterior, la clase “al menos un verso suelto” (C-1.2) incluye todas las formas con rima asonante. Conque, aplicando primero Vs hemos obtenido una clase (C-1.1) cuyas integrantes no tienen ningún verso suelto, pero además comparten la la característica de tener todas la rima consonante, que la señalamos entre paréntesis por ser un rasgo implícito y no definitorio.
3.2. Paso 2
Variable Tv (tipo de versificación) en C-1.1 y C-1.2
Ahora aparecen 4 clases más:
- C-1.1.1, con 13 tipos de estrofas de versificación regular: cuarteta, redondilla, quintilla, sextilla, octava de arte menor, décima, cuarteto, serventesio, quinteto, sexteto, octava real, octava de arte mayor y cuaderna vía.
- C-1.1.2, con 2 de versificación irregular: lira y copla de pie quebrado.
- C-1.2.1, cuya única representante de versificación irregular, que es la seguidilla.
- C-1.2.2, donde podemos meter 4 tipos de estrofas con versificación regular: terceto, tercerilla, soleá y copla.
No aplicamos Tr (tipo de rima), porque no es diferenciadora en C-1.1, donde todas tienen rima consonante. Por consiguiente, respetando el criterio de ir de lo general a lo particular la que debemos usar es Tv.
La clase seguidilla está definida con las siguientes características esenciales: estrofa de versificación irregular con al menos un verso suelto. ¿Entonces esa es la definición de seguidilla? No. Esas características esenciales nos valen para distinguirla de cualquier otro tipo de estrofa que intervenga en nuestra clasificación, y formarán parte de su definición, pero resultan insuficientes para diferenciarla de los demás tipos de estrofas que no hayan intervenido en nuestra clasificación. Para definir seguidilla, a esas características esenciales tenemos que sumar las que siguen: el número de versos que la componen, cuatro, y los esquemas usuales: 7- 5a 7- 5a|10- 6a 10- 6a y 6- 6a 11- 6a.
3.3. Paso 3
Variable Mv (medida de los versos) en C-1.1.1 y C-1.2.2
Tenemos estas nuevas clases:
- C-1.1.1.1, con 6 tipos de estrofas de versos octosílabos: cuarteta, redondilla, quintilla, sextilla, octava de arte menor y décima.
- C-1.1.1.2, con 5 de estrofas de versos endecasílabos: cuarteto, serventesio, quinteto, sexteto y octava real.
- C-1.1.1.3, de la que la octava de arte mayor, de versos dodecasílabos, es su representante en solitario.
- C-1.1.1.4, donde solo está la cuaderna vía, que tiene versos alejandrinos.
- C-1.2.2.1, con 3: tercerilla, soleá y copla, cuyos versos son octosílabos.
- C-1.2.2.2, en la que el terceto, de versos endecasílabos, es el único tipo.
Podríamos haber aplicado otras variables, por ejemplo, Tr o al Nv, pero de esta forma, como ya hemos destacado en los pasos anteriores, vamos de lo general a lo particular, que es uno de los principios básicos de la clasificación jerárquica.
3.4. Paso 4
Variable Nv (número de versos) en C-1.1.1.1, C-1.1.1.2, C-1.1.2 y C-1.2.2.1
Como hemos visto, con la aplicación de esta variable en dichas clases creamos:
- C-1.1.1.1.1, para la cuarteta y la redondilla (cuatro versos).
- C-1.1.1.1.2, donde, con cinco versos, está la quintilla.
- C-1.1.1.1.3: sextilla (6 versos).
- C-1.1.1.1.4: octava de arte menor (8 versos).
- C-1.1.1.1.5: décima (10 versos).
- C-1.1.1.2.1, en la que tenemos el cuarteto y el serventesio (4 versos).
- C-1.1.1.2.2: quinteto (5 versos).
- C-1.1.1.2.3: sexteto (6 versos).
- C-1.1.1.2.4: octava real (8 versos).
- C-1.1.2.1: lira (5 versos).
- C-1.1.2.2: copla de pie quebrado 6 versos.
- C-1.2.2.1.1, donde se encuentran la tercerilla y la solea (3 versos).
- C-1.2.2.1.2: copla (4 versos).
La variable Nv es la que se usa en primer lugar en las clasificaciones usuales de estrofas. Sin embargo, nosotros la hemos utilizado en cuarto lugar. En la Fase de evaluación compararemos ambas clasificaciones, y veremos las virtudes y defectos de cada una.
3.5. Paso 5
Variable «orden de las rimas» en C-1.1.1.1.1 y C-1.1.1.2.1
Para distinguir cuarteta de redondilla, y cuarteto de serventesio, podemos aplicar la variable orden de las rimas en las clases C-1.1.1.1.1 y C-1.1.1.2.1. Al hacerlo nos quedan:
- La clase C-1.1.1.1.1.1 para cuarteta con orden abab (rima alterna) y C-1.1.1.1.1.2, con orden abba (rima abrazada) para la redondilla.
- La clase C-1.1.1.2.1.1, para cuarteto con orden ABBA (rima abrazada) y C-1.1.1.2.1.2 para serventesio, cuyo orden de las rimas es ABAB (rima alterna).
3.6. Paso 6
Aplicamos la variable Tr (tipo de rima) en C-1.2.2.1.1
Para lograr que todas las clases sean igual de específicas, es decir, que contengan únicamente un tipo de estrofa, solo nos queda aplicar la variable Tr en la clase C-1.2.2.1.1. Tendremos por un lado la clase C-1.2.2.1.1.1 para la tercerilla (con rima consonante) y la C-1.2.2.1.1.2 para la soleá (con rima asonante).
4. Fase de evaluación
En este primer artículo sobre la clasificación hemos usado un documento que ya presentaba la información bien estructurada. Esto ha supuesto realizar con bastante comodidad la fase de ejecución. No fue necesario determinar las características a comparar. Y tampoco tuvimos que fijar las variables que vertebrarían nuestra clasificación, porque en la definición de estrofa aparecían casi subrayadas.
Por otro lado, solo la elección de la primera variable entrañó alguna dificultad. Luego, atendiendo al criterio de ir de lo general a lo particular, fue sencillo dar con la variable más recomendable.
A modo de conclusión, nos parece que la clasificación que hemos construido cumple con el objetivo que nos planteamos. Es menos costoso memorizar las características de los diferentes tipos de estrofas en esta clasificación jerárquica que en la clasificación usual por número de versos. ¿Por qué? Además de los beneficios que ya señalamos en el artículo La clasificación como técnica de estudio, a continuación citamos otros que también estimamos relevantes:
- Tenemos 31 clases frente a las 26 de la clasificación por número de versos, pero la información se presenta de una manera mejor estructurada y clara.
- Esta organización facilita recordar casi todas las diferencias y similitudes entre los diversos tipos.
- En la clasificación por número de versos prácticamente toda la información (las características) se acumulaba en las clases específicas de cada tipo de estrofa. Nuestra clasificación reorganiza dicha información y la distribuye por las clases superiores. Así, si recordamos la relación entre las clases, podemos tener acceso a la misma cantidad de información con menor esfuerzo.
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